En días pasados, en la ciudad de Riohacha, se llevó a cabo la graduación de 16 estudiantes pertenecientes a la Maestría en Educación extensión La Guajira. Una emotiva ceremonia encabezada por el Decano de la Facultad de Ciencias y Educación Dr. Ómer Calderón, la Coordinadora encargada Dra. Liliana Pizzinato y los docentes Wilson Jairo Pinzón Casallas, William Manuel Mora Penagos, Jorge Orlando blanco Suárez y Margot Guzmán Munar en representación de los énfasis en Educación Matemática; Educación en Ciencias de la Naturaleza y la Tecnología; Ciencias Sociales, Ética, Política; y Educación Intercultural, Etnoeducación y Diversidad Cultural respectivamente. Jornada en la cual se dieron cita los graduandos, sus familias y los 39 egresados que se graduaron en ceremonia virtual en diciembre de 2021.

La Maestría en Educación Extensión La Guajira inició en diciembre de 2019 y se desarrolló en el marco de un convenio entre la Universidad Distrital Francisco José de Caldas y el Ministerio de Ciencia Tecnología e Innovación, en dos sedes: Riohacha y San Juan de Cesar.

En esta solemne ceremonia brilló la felicidad por el cumplimiento de una nueva meta en el proyecto de vida de cada uno de los graduandos, las profundas y reflexivas palabras también acompañaron la jornada, así como el folclor vallenato gracias al músico y graduando Julio Cesar Flores.

Tras recordar las falencias de estudiantes de primaria, secundaria, el bajo rendimiento académico, la deserción en los primeros semestres de la universidad, los retos de la educación, el Decano de la Facultad de Ciencias y Educación Dr. Ómer Calderón en su discurso invitó a la reflexión diciendo: “Es hora de mirar qué pasa con la enseñanza y sus efectos en el aprendizaje, más allá de examinar la evaluación, puesto que ésta no es otra cosa que un instrumento que algo dice de lo que sucede hoy en la escuela. Ese algo es un índice de que nuestro sistema de enseñanza debe mejorar y para eso un paso sencillo y concreto, pero universal, ha sido la formación que ustedes han recibido en esta maestría en educación”. Agregó “como ven, ustedes hicieron una maestría qué más que certificarlos en este acto, los ha metido en un problema. Esa es la intención de nuestros posgrados, despertar la curiosidad, fomentar la capacidad crítica, sensibilizarnos sobre el mundo y la escuela, y por eso con este título van a continuar en el ejercicio de la práctica de enseñanza con los nuevos saberes que fueron compartidos por sus maestros para hacer realidad que cada uno de nuestros alumnos tenga una faz de dicha y felicidad, cuando puedan leer más y mejor, cuando comprendan la inmensidad de la gravitación universal, cuando, en fin, problematiza con su maestro al mundo y con esto se pregunta por el futuro y, con ustedes nuevos magister, vamos a construir con nuestros alumnos ese horizonte que no es otro que el de lograr que todos, sin ningún tipo de discriminación, podamos vivir sabroso”.

Por su parte la docente Liliana Pizzinato Coordinadora encargada de la Maestría en Educación La Guajira dijo: “estas palabras son una oportunidad de reconocimiento a los esfuerzos tras bambalinas, vividos por los beneficiarios y beneficiarias del Convenio de formación posgradual apoyado por MINCIENCIAS, por el equipo docente que ha orientado el proceso académico en la Maestría y por el equipo administrativo que ha acompañado las actividades propias de este orden. Una Maestría acompañada por la distancia física y la cercanía de la virtualidad, seguramente con muchas noches en vela, dedicadas al compromiso académico y a la investigación, por parte de sus estudiantes como protagonistas del proceso y a sus profesores como acompañantes del mismo. Es una satisfacción compartir este momento en el que se cierra un capítulo en la formación docente y se abre otro en el ejercicio de una investigación educativa situada, contextual, plural y diversa”.

Alex Manuel Martínez Amaya también hizo parte de la ceremonia con las palabras tituladas “Hemos cambiado”, compartimos un fragmento de estas reflexiones: “Es tiempo de cambiar, de mutar, de ya no ser como siempre hemos sido. Hoy, más que recibir un diploma de grado, damos un paso a una nueva etapa como Magíster, hemos roto costumbres y demostramos que cualquier cosa que estuviésemos repitiendo por mucho tiempo, sin lograr resultados positivos, la podemos mejorar y de esa manera alcanzar el resultado esperado. Este logro, nos ha abierto los ojos, argumentando que ya es tiempo de seguir adelante, de dejar de ser los mismos, de luchar por convertirnos en la mejor versión de nosotros mismos. Nuestro éxito, es el resultado del convencimiento de que si podemos, que si estamos aquí, es porque hemos superado el “yo soy así”, porque si estamos aquí, es porque somos diferentes. Claramente demostramos que ya no somos hijos del ayer, que por fin nos hemos liberado del peso que nos tenía estancados en un solo lugar, decidimos movernos, cambiar de sitio y que a pesar de todo lo malo, negativo, dificultoso, tedioso, y aun nostálgico de nuestro recorrido, si estamos aquí, es porque llegamos a la meta del camino que hace más de dos años empezamos y logramos expandirnos más allá de nuestras competencias”.

En la jornada se extendió un saludo afectuoso y de recuperación a Jean Carlos Ruiz Miranda, estudiantes que por problemas de salud no pudo sustentar su trabajo de grado, ni asistir a la ceremonia.

Ahora para estos maestros continúa el proceso de condonación, que tiene entre los requerimientos replicar las actividades propuestas en su trabajo de investigación o pertenecer y participar en grupos de investigación avalados por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación. Así es como se busca que se fomente la investigación y la educación en la región.

La Facultad de Ciencias y Educación felicita y exalta el trabajo desarrollado el proceso académico desarrollado y espera que el impacto del mismo se manifiestes en cambios educativos significativos para la región y el país.