306 estudiantes de la Facultad de Ciencias y Educación recibieron grado al culminar con éxito un proceso de formación académica; este es el resultado final de sumar esfuerzos, dedicación y compromiso en sus estudios.

Estos estudiantes como maestros, maestras y como investigadores, son hoy los nuevos profesionales, quienes encaran nuevos retos y apuestas para la educación del país y el mundo.

Fueron tres ceremonias en las que la Decana de la facultad, profesora Cecilia Rincón Verdugo, reiteró en su discurso una reflexión sobre el desarrollo del pensamiento crítico, fundamentado desde la educación y la investigación como pilares de la formación profesional, en una universidad comprometida en alcanzar una educación| de calidad, donde sus estudiantes se han formado y han adquirido las habilidades necesarias para superar el déficit de producción de conocimiento científico que compromete el desarrollo social, cultural y económico de nuestro país. Afirmó que el desarrollo del pensamiento crítico impone la necesidad de que los estudiantes aprendan a reflexionar, a razonar para discernir entre lo verdadero y lo falso.

La directiva afirmó “tener pensamiento crítico no significa ser rebelde o contestatario, tener un pensamiento crítico es aprender a valorar lo que le conviene a la sociedad y al desarrollo humano, pensar críticamente es proteger y fortalecer la libertad, la democracia, los derechos de las personas, la justicia social, el cuidado del cuerpo y el cuidado de la tierra”.

Así fue como con cientos de aplausos, sonrisas, abrazos y hasta lágrimas los graduandos y sus familias se despidieron de la Facultad de Ciencias y Educación con agradecimiento y cientos de experiencias vividas en la Institución.